Si tienes un sitio web o estás pensando crear uno, elegir el hosting o alojamiento es un paso fundamental. Este servicio es el espacio que se renta en internet para almacenar la web, sus archivos y contenido, de manera que se pueda acceder a ellos.
Existen varios tipos de hosting, entre los que están el servidor dedicado y el VPS (Servidor Privado Virtual), que son de los más populares y demandados. Ambos tienen sus características y ventajas particulares. Conocerlas, te ayudará a escoger aquel que sea más conveniente para tu página web o aplicación.
¿Qué es un servidor dedicado?
Un servidor dedicado es un tipo de alojamiento web en el que el cliente alquila un servidor completo para su uso único. Es decir, todos los recursos del servidor, como CPU, espacio en disco y transferencia, son exclusivos de un usuario. De esta manera, es buena idea contratar servidor dedicado para tener control total y una web con gran rendimiento.
Ventajas de contratar un servidor dedicado
Los servidores dedicados implican ventajas interesantes, como la posibilidad de personalizar el servidor en su totalidad para adaptarlo a las necesidades específicas. Por ejemplo, el cliente puede elegir qué sistema operativo usar, las configuraciones del hardware y las aplicaciones a instalar.
Al elegir un servidor dedicado administrado no necesitas tener conocimientos en administración web, porque los expertos de la empresa de hosting serán los encargados de su mantenimiento y gestión, lo que incluye la actualización de software, el seguimiento del rendimiento y la resolución de problemas técnicos. Por lo tanto, no tendrás que preocuparte por asuntos técnicos. En cuanto a la seguridad, el acceso al servidor está restringido y adicionalmente es posible implementar otras medidas de protección avanzadas.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que los servidores dedicados son un tipo de hosting costoso, por lo que son recomendados para páginas web que reciben mucho tráfico, aplicaciones que requieren un rendimiento excepcional y empresas con datos sensibles.
¿Qué es un VPS o Servidor Privado Virtual?
Un VPS es una partición virtual que forma parte de un servidor físico y que actúa como un servidor dedicado, sin embargo, es similar al hosting compartido en el sentido de que se comparten los recursos con otros VPS que estén en el mismo servidor.
Ventajas de un VPS
Una de las principales ventajas del VPS es que puede crecer a la par de tu proyecto. Esto quiere decir que es posible escalar los recursos de acuerdo con lo que requieras. Ya sea aumentar la CPU, la memoria RAM o el almacenamiento, lo puedes hacer sin problemas y con unos cuantos clics, sin tener que migrar a otro servidor.
Por su parte, un servidor vps España es una opción a considerar si deseas tener tu web en un hosting localizado. Tener un servidor en España mejora la velocidad de carga para el público que entra desde el país, lo que a su vez te ayuda a brindar una mejor experiencia de usuario.
Ejemplo de uso de un VPS para aplicaciones específicas
Los Servidores Privados Virtuales pueden utilizarse para aplicaciones específicas, por ejemplo, el VPS Moodle, que es un hosting optimizado para esta plataforma de aprendizaje en línea que, por sus características, requiere un servidor confiable y personalizable para funcionar correctamente. Al utilizar un VPS, las instituciones educativas pueden hacer ajustes en los de acuerdo con el número de usuarios y las funcionalidades que deban implementarse.
Lo que debes saber para elegir entre servidor dedicado y VPS
Para elegir entre un servidor dedicado y un VPS, considera estos puntos:
- Un servidor dedicado suele ser más costoso que un VPS, lo que se justifica por su rendimiento y seguridad.
- Si tu proyecto web o aplicación requiere de configuraciones a medida y un alto nivel de seguridad, lo mejor es contratar un servidor dedicado. Por su parte, un VPS es la opción a elegir si buscas entre flexibilidad y coste.
- Si tu web tendrá un crecimiento rápido, el VPS es más adecuado porque se pueden escalar los recursos.